martes, 14 de febrero de 2012

Fray Arístides Jimenez Richardson


LA CÁRCEL HOY, desde la Perspectiva de la Iglesia.
Por: Fray Arístides Jiménez Richardson
Email: casadelredentor@gmail.com

Facebook: PArístides Jimenez Richardson



EL TRATAMIENTO
POST-PENITENCIARIO EN LAS CASAS DEL REDENTOR

(I)

El Tratamiento Post-Penitenciario en las Casas del Redentor, es la continuación del programa formativo, que la persona imputada de un hecho por medio del cual ha sido remitida a un centro de detención, ha recibido durante su estadía en dicho recinto. Esto se expresa partiendo del criterio de que, real y efectivamente en el recinto carcelario se desarrolle una verdadera Gestión Humana para con los penados.

No olvidemos que, todas las cárceles o centros de detención, por si mismos constituyen lugares de conflictos sicológicos, espirituales y corporales para todas las personas llevadas hasta tales estancias; la condición natural del ser humano es la libertad creativa, que le permite la interrelación con sus congéneres sin detrimento alguno de la integridad y dignidad humana personal y de los demás, participando del cuidado del medio ambiente.

La esencia del ser humano es el bien, procurar la bondad de las cosas. Este ideal se ve manchado por la realidad del doloroso pecado, delito, fallo, fragilidad humana, infracción que hace mover la acción del Ministerio Público, Cuerpo de Seguridad Ciudadana y Poder Judicial, hasta “arrojar” al imputado en un centro de detención con la finalidad de evitar que sus acciones perversas produzcan heridas y daños a la sociedad en general; aislando al responsable del delito, el Estado ha de procurar su rehabilitación para retornarlo al seno de la familia y la comunidad, según el espíritu reflexivo de muchos tratadistas del Derecho Penitenciario, Penitenciaritas y Criminalistas.


Hay una situación lacerante, de difícil pero nunca imposible redención: la víctima y sus familiares, el condenado penalmente y sus familiares. La sociedad en general. Un proyecto penitenciario que olvide esto, sencillamente se engendra violento y mutilado desde antes de nacer.

No todas las personas que llegan, voluntariamente o son remitidas por las autoridades competentes, hasta las Casas del Redentor, provienen desde los Centros de Corrección y Rehabilitación del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria que implementa actualmente la República Dominicana, sino que, no pocos salen de la antigua estructura penitenciaria dominicana que tanto degrada la dignidad humana. Esto nos obliga a trabajar en la superación de esas deficiencias.

Comunicación y Prensa.


1 comentarios:

  1. Da pena ver como el gobierno se burla de los derechos humanos al mantener abierto un lugar como la Victoria en Republica Dominicanay ver que las naciones unidas no hacen nada solo bla bla y mas bla gracias Fray Aritides por su lucha Dios le bendiga para que continue

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